Diario de un soñador: "Ha caído"; por Luis Rivero
Día 1
4:30 am. Alguien llama al celular: "¡Enciende el televisor! -ordena una voz- Ha caído". Entre largos pestañeos e ideas confusas fui despertando, despistado por aquella llamada que había perturbado mi sueño.
- ¿Quién cayó? ¿Será una broma? ¿Qué está pasando? - fueron algunas de las preguntas que llegaron a mi cabeza.
Sin entender bien lo que ocurría, y con la mente aún medio dormida, me levanté de la cama, encendí el televisor y coloqué un canal de noticias, o bueno, el que antes solía serlo. Durante estos últimos meses ya solo se dedicaban a transmitir comiquitas, programas extranjeros y algo llamado "Notipatria".
Sin embargo, esta vez había algo extraño. Su programación parecía haber cambiado. El presentador de siempre ya no tenía el mismo entrecejo arrugado, ni el mismo tono escueto y mecanizado.
En cambio, su rostro insinuaba una alegría evidente, que ni los gestos serios de un periodista podían disimular.
Recuerdo haber visto, hace algún tiempo ya, algo parecido, creo que fue la madrugada del 7 de diciembre del 2015; cuando la oposición ganó la mayoría en la Asamblea Nacional. Sí, lo recuerdo bien.
Pero esta madrugada la noticia era otra.
El sueño me había abandonado, comenzaba a caer en cuenta que aquello no era una ilusión de noches, ni mucho menos. ¡Era real! Mientras el presentador hablaba y diferentes imágenes pasaban por la pantalla, yo solo podía observar el cintillo en la parte inferior que retumbaba en mi alma:
Noticia de última hora. Nicolás Maduro fue derrocado.
4:45 am, solo quince minutos habían pasado y las preguntas que surgieron de aquella llamada habían sido contestadas. Tomé mi celular, devolví la llamada y pregunté: ¿Qué fue lo qué pasó? ¿Qué es lo qué pasará?
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